El 5 de junio fue establecido por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) como el Día Mundial del Ambiente. El sentido de esta fecha es reconocer el derecho de todas las personas a vivir en un ambiente cuidado, que proporcione salud y bienestar. En sintonía con esta propuesta, la Comisión de Medio Ambiente de la Facultad de Psicología (UNT) organiza el taller “Intervenciones Conductuales Pro ambientales”, el jueves a las 11 en su sede del Centro Prebisch (parque 9 de Julio).
Se abordarán temas como el riesgo ambiental, las conductas sustentables y la huella ecológica, en una actividad que estará a cargo de la Dra. Graciela Tonello (especialista en Psicología Ambiental, UNT-Conicet), de Francisco de Rosa (de Meta Tucumán) y de Aramis Padilla (presidente del Centro de Estudiantes de la Facultad).
Docentes, no docentes, estudiantes y representantes de organizaciones ambientalistas debatirán sobre cómo cambiar hábitos conductuales para generar un ambiente limpio y agradable. La jornada finalizará con recolección de papel para su reciclado y plantando almácigos, con el objetivo de fomentar el compromiso con el cuidado del espacio propio.
Para considerar
“La contaminación del aire y del agua, la contaminación sonora, la contaminación lumínica, la suciedad, la densidad de población, el hacinamiento, la falta de acceso y disfrute de la naturaleza, los problemas de seguridad, son todos estresores ambientales que comprometen seriamente la salud pública. Existe amplia evidencia científica sobre el potencial sanador de la naturaleza; su experiencia produce beneficios fisiológicos y psicológicos, que pueden reducir los niveles de estrés y ansiedad, así como promover interacciones sociales y emociones positivas”, explica Tonello.
“Tenemos que re-aprender, para comportarnos sustentablemente y sobrevivir a un mundo que ha dejado de ser lo que era -añade-. Aprender a cuidar los recursos naturales y el cuidado del otro. Porque la sustentabilidad va más allá de la preservación del ambiente físico, abarca también una dimensión social que requiere la adopción de estilos de vida que fomenten el altruismo, la equidad y el consumo moderado”.
Sostiene Tonello que el aumento de la temperatura del planeta está provocando eventos climáticos extremos, con consecuencias económicas y sociales devastadoras. “Es importante considerar el contexto, porque si al cambio climático se le suma pobreza y suciedad, su impacto será mayor en la salud integral”, apunta.
Gigantes de la tecnología crean un fondo histórico para compensar los daños que provocan al ambiente“Con respecto a la salud física, los especialistas comprobaron que cada año la epidemia de dengue es peor. Además del aumento de la temperatura y las lluvias prolongadas que hacen aumentar los criaderos de mosquitos, se observó que la mayor cantidad de casos se dieron en barrios vulnerables, en zonas con acumulación de basura, sin agua potable, o con pérdidas de líquidos cloacales -agrega la especialista-. Con respecto a la salud mental, en algunas personas la crisis climática o el deterioro ambiental en general les provoca incertidumbre y puede agudizar síntomas de ansiedad, lo que conocemos como eco ansiedad o ansiedad climática”.
“Las estrategias de mitigación y adaptación que nos requieren no serán posibles solo con conductas y voluntades individuales, se necesita un modelo de Estado que considere el cuidado del ambiente como una variable transversal a toda su estructura de gobernanza, e implemente las regulaciones y controles correspondientes”, advirtió.
Sostiene Tonello: “en nuestra comunidad se está pasando a la acción en varios frentes. Destaco la creación del Observatorio Ambiental de la UNT; también el pasado 23 de mayo se llevó a cabo el Primer Foro Tucumán Responsable, organizado por Meta Tucumán, en el cual nos encontramos académicos y tomadores de decisiones como emprendedores, políticos, empresarios y activistas ambientales para debatir temas como la basura y delinear estrategias para su disposición de forma segura. Todo esto es el centro de lo que llamamos sustentabilidad; asegurar no solo el cuidado del ambiente físico sino también generar salud y bienestar subjetivo”.